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lunes, 23 de enero de 2023
Expresidente ruso predice nueva alianza militar antiestadounidense
La crisis de Ucrania puede conducir a la fundación de un bloque de países "hartos" de Washington, dice Dmitry Medvedev
Expresidente ruso predice nueva alianza militar antiestadounidense
FOTO DE ARCHIVO. Dmitri Medvédev. © Sputnik / Yekaterina Shtukina
El flujo continuo de ayuda militar a Kiev muestra claramente que el Occidente colectivo está tratando de “agotar o, preferiblemente, destruir” a Rusia, comentó el domingo el expresidente del país, Dmitry Medvedev. El esfuerzo, sin embargo, en última instancia puede ser contraproducente para los EE. UU. y sus aliados, cree.
Medvedev, quien actualmente se desempeña como vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, hizo los comentarios en una publicación en las redes sociales, días después de una reunión en la base aérea estadounidense Ramstein en Alemania en la que las potencias occidentales se comprometieron a continuar apoyando a Kiev.
“La reunión de Ramstein y la asignación de armamento pesado a Kiev no dejan lugar a dudas de que nuestros enemigos intentarán desgastarnos por tiempo indefinido o, preferiblemente, destruirnos”, escribió el expresidente.
Sin embargo, la prolongación de las hostilidades en Ucrania puede conducir en última instancia al surgimiento de un nuevo bloque militar que reúna a las naciones “hartas de los estadounidenses”, sugirió Medvedev.
“Esto siempre ha sucedido en la historia de la humanidad durante las largas guerras. Y Estados Unidos finalmente abandonará la vieja Europa y lo que quede de los desafortunados ucranianos, y el mundo volverá a un equilibrio una vez más”, dijo el ex líder, advirtiendo, sin embargo, que podría ser “demasiado tarde” antes de que esto suceda.
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Moscú ha instado repetidamente al Occidente colectivo a que deje de “bombear” a Ucrania con armas, sosteniendo que solo prolongaría las hostilidades en lugar de cambiar el resultado final. Altos funcionarios rusos han caracterizado repetidamente lo que está sucediendo como una guerra de poder entre Rusia y la alianza de la OTAN liderada por Estados Unidos en lugar de simplemente un conflicto con Ucrania.
Rusia envió tropas a Ucrania el 24 de febrero de 2022, citando el fracaso de Kiev en la implementación de los acuerdos de Minsk, que fueron diseñados para otorgar a Donetsk y Lugansk un estatus especial dentro del estado ucraniano. Los protocolos, negociados por Alemania y Francia, se firmaron por primera vez en 2014. Desde entonces, el expresidente ucraniano Pyotr Poroshenko admitió que el objetivo principal de Kiev era usar el acuerdo para ganar tiempo y “crear fuerzas armadas poderosas”.
Mientras tanto, la ex canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, han corroborado esa admisión, afirmando que los acuerdos de Minsk nunca tuvieron la intención de cumplirse, sino que fueron simplemente una estratagema para ganar tiempo para que Ucrania desarrollara su ejército.
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