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martes, 21 de noviembre de 2023

¿Eres un influencer o el influenciado? Reverenda Kat Carroll No es necesario ser psiquiatra para darse cuenta de que las redes sociales y los medios tradicionales se utilizan para influir en nuestro comportamiento. El gran volumen de anuncios de productos y servicios es abrumador. En los años 70, es posible que aparecieran un par de comerciales cada 15 a 30 minutos. Ahora, incluso los vídeos que vemos en nuestros dispositivos están plagados de anuncios cada pocos minutos (¡incluso algunos para meditar!). En un momento en el que deberíamos abstenernos de realizar compras importantes o tomar decisiones apresuradas, estamos siendo influenciados para endeudarnos más, probar nuevos medicamentos con una letanía de efectos secundarios o tomar partido en los problemas actuales cuando no tenemos todos los hechos. Los más importantes últimamente han sido: Cambio climático Conflictos globales Opciones de género Preocupaciones económicas/financieras Suministro y Costo de Energía, Vivienda, Combustible, Alimentos y Agua Inmigración Incursiones OVNI/UAP Libertad de expresión Lo que algunos quizá no sepan es que se está librando una batalla por nuestros corazones y nuestras mentes. Pero no es una guerra cinética... Es una guerra de quinta generación y está diseñada para influir en nuestros sentimientos, nuestros votos e incluso para aceptar cambios sociales que pueden no ser lo mejor para nosotros . Covid-19 fue el ejemplo perfecto de cómo cambiar nuestra conciencia. Pon a un tipo con una bata de laboratorio blanca frente al mundo y no importaba si cambiaba de opinión repetidamente. Sólo los numerosos anuncios parecían importar, y con frecuencia nos decían qué hacer y qué temer. Las empresas se alinearon para evitar perder la cobertura del seguro o para obtener los incentivos financieros que se les ofrecían. No necesariamente sabían que estaban apoyando agendas que erradicaban nuestras libertades, nuestra salud e incluso nuestro derecho a elegir. Quienes se molestaron en realizar alguna investigación descubrieron que lo que nos decían a menudo no era cierto. Pero como la información se difundió en los principales medios de comunicación, la mayoría la creyó, y todavía lo cree. La gente quería encajar, no causar problemas ni ser rechazada por familiares, amigos y empresas que seguían la agenda. Muchos de los que intentaron advertir a familiares y amigos se encontraron al margen de la discusión y, a menudo, fueron bloqueados por amigos, silenciados o ignorados. Pero no hubo malas intenciones detrás de compartir la información. ¿Por qué es tan fácil descartar información válida de otras fuentes? En la guerra cinética original, el estándar era bombardear una ciudad, cortar el agua y los suministros cruciales para ablandar a la población para una toma de poder. En esta nueva guerra cibernética y de quinta generación , se trata de controlar la información. Al igual que ocurre con la Dialéctica Hegeliana (Problema, Reacción, Solución), nos lleva a tomar decisiones basadas en información falsa con la anticipación de una solución. Esa solución siempre fue el objetivo de las personas detrás de la agenda. La mayoría de la población fue inducida (como ovejas) a hacer o permitir esa agenda específica, pero sin saberlo. Ése es el aspecto psicológico de este tipo de guerra. Se utilizan algoritmos informáticos para enviarle solo lo que le interesa y lo que sigue (y el sistema es bueno en eso). Pero es posible que se pierda importantes puntos de vista alternativos. Hemos tenido una censura desenfrenada de información y opiniones, y todavía ocurre en todo el mundo. A menudo es más fácil encontrar información de otro país sobre lo que sucede en nuestra nación debido a la fuerte censura en Estados Unidos. La gente argumenta que estos algoritmos son tan buenos, y cada uno cree que tiene razón en función de lo que ha visto o leído y de las plataformas o medios de noticias que sigue. Es posible que a cada uno le falte información vital. La mayoría no entiende que son un pequeño número de corporaciones las que controlan toda la información proporcionada en los medios y sus subsidiarias. Rara vez sabemos toda la verdad, y hace años aprendí que no existen muchas leyes que nos protejan de la información falsa compartida por los medios de comunicación. ¡Incluso las leyes relativas a la información gubernamental y las mentiras son, en el mejor de los casos, ambiguas! https://knightcolumbia.org/content/when-are-lies-constitutionally-protected ¿Cómo se espera que avancemos como sociedad cuando la verdad a menudo se oculta al público o nos hace pelear entre nosotros? Dividir y conquistar ha sido durante mucho tiempo parte de la agenda en la guerra. Nos influenciamos unos a otros. En una época en la que se habla de ascensión y de elevar vuestra vibración, en las redes sociales se están difundiendo muchos comentarios sarcásticos y temerosos. Algunos sienten que es importante compartir las peores historias sobre la guerra, la violencia y la corrupción. La forma en que respondemos a la información refleja nuestra personalidad. ¿Publica artículos y comentarios que sean positivos, de apoyo, alentadores o, si no está de acuerdo, critica a la persona o sus comentarios cuando podría simplemente ignorarlos? También ha quedado claro que los mensajes y los emojis no siempre reflejan el verdadero significado de lo que se dice. La gente puede ser perezosa y buscamos atajos como emojis y abreviaturas. Pero perdemos el beneficio de la interacción cara a cara, la inflexión de la voz, el contacto visual y el lenguaje corporal. Un mensaje escrito puede no ser suficiente y causar confusión cuando no está claro. Incluso puede provocar que algunos se enojen. En esos casos, creo que es mejor pedir una aclaración antes de sacar conclusiones precipitadas. En lo que respecta a los medios, ya sean transmisiones de televisión o plataformas de redes sociales, podemos discernir mejor si nos preguntamos cómo nos hace sentir la información. ¿Es beneficioso, causa miedo, te hace querer tomar partido (¿es divisivo?). ¿Es programación predictiva? Si es así, es probable que esté bajo la influencia de alguien o grupo con una agenda. Sólo hay 6 empresas que controlan el flujo de información y es parte de la guerra psicológica utilizada contra el público. Para ver un gran vídeo sobre este tema, escuche a Gregg Braden~ 'LOS SEIS GRANDES' y la guerra de quinta generación que dan forma a nuestra perspectiva sobre los acontecimientos mundiales Estos son un par de memes que vi sobre la religión que está en primer plano en nuestras mentes con el conflicto actual en el Medio Oriente. Sabiendo que a menudo hay más cosas en juego de lo que se dice al público, no tomo partido y observo la situación. Llevamos un tiempo lidiando con desinformación, desinformación, censura, propaganda y mala comunicación. Depende de nosotros mirar más profundamente las situaciones y discernir la verdad por nosotros mismos en lugar de que nos digan qué creer, como en este clip de MSNBC: Puedes escuchar la conversación completa sobre Twitter y la libertad de expresión haciendo clic en la imagen de arriba. Cada uno de nosotros a veces asume el papel de influenciador. Necesitamos ser conscientes de lo que decimos y cómo afectará a los demás. Espero que cada uno de nosotros encuentre las palabras para apoyarnos y animarnos mutuamente en este momento de lucha y transición global... Y, con suerte, una transición a un mundo mucho mejor una vez que superemos este tiempo de tribulación. No es bonito, pero pretende despertarnos para pensar por nosotros mismos. Aquello en lo que te enfoques se expandirá, así que elige sabiamente lo que deseas seguir y cómo eliges responder. Ser una influencia positiva en el mundo.

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